Nuestro Pure C8 MCT de nueva generación, esta elaborado exclusivamente con ácido caprílico (C8) 100% puro, extraído de fracciones oleicas de cocos de alta calidad y cuidadosamente procesado para preservar su pureza, estabilidad y funcionalidad metabólica.


El ácido caprílico (C8) es el triglicérido de cadena media que el organismo absorbe y convierte más rápidamente en cetonas, una fuente de energía limpia, eficiente y estable. Por su estructura, el C8 es la forma más pura, rápida y potente de MCT, ya que llega directamente al hígado, donde se transforma en energía sin pasar por procesos digestivos complejos ni almacenarse fácilmente como grasa.


¿Por qué usar Pure C8 MCT Oil?


Las razones más comunes por las que las personas incorporan Pure C8 MCT Oil en su rutina diaria son:

  • Energía limpia y rápida (a partir de cetonas)

  • Enfoque y claridad mental

  • Apoyo a un metabolismo saludable

  • Digestión fácil y rápida absorción


Energía limpia y rápida (a partir de cetonas)


El C8 es un tipo específico de grasa con 8 átomos de carbono, lo que permite que se absorba con gran facilidad y sea convertido rápidamente en cetonas. Estas cetonas actúan como una fuente alternativa de energía a la glucosa, proporcionando un impulso energético más estable, sin picos ni caídas bruscas.


Apoyo al control del apetito y los antojos


La producción de cetonas a partir del C8 puede favorecer la saciedad y ayudar a reducir los antojos, lo que resulta especialmente útil durante el ayuno intermitente o en dietas bajas en carbohidratos, apoyando la adherencia y el control del apetito.


Combustible para el cerebro: enfoque y claridad


Aunque el cerebro utiliza principalmente glucosa, también puede usar cetonas como fuente de energía. Muchas personas reportan una mayor claridad mental, mejor enfoque y menos sensación de “niebla mental”, especialmente cuando antes experimentaban bajones asociados al consumo de carbohidratos.


Digestión rápida y uso recomendado


El C8 se digiere con mayor facilidad que otras grasas, ya que se transporta directamente al hígado para convertirse en energía.

Para una mejor tolerancia digestiva, se recomienda comenzar con una dosis baja y aumentar gradualmente:

  • Empezar con ¼ de cucharada al día, preferiblemente con comida

  • Si se tolera bien, aumentar a ½ cucharada

  • Según tolerancia, se puede consumir hasta un máximo de 3 cucharadas al día.


Puede añadirse fácilmente a café, batidos o bebidas calientes, integrándose sin dificultad a la rutina diaria.